Cuando
leemos los últimos acontecimientos Mundiales estamos siendo informados que
Corea del Norte, se esta volviendo una nación con un alto poder bélico y donde
su líder político Kim Jong Un, solo esta pensando en hacer uso de esa fuerza bélica
para destruir a las naciones vecinas y a sus aliados. Este líder asiático, esta igual que nuestro
presidente Mauricio Funes Cartagena, cuando habla y aprovecha su programa
radial de los Sábados para desprestigiar al empresariado salvadoreño. Ambos lideres están cegados por la ira, por
la soberbia y por la envidia, no pueden entender que todo tiene su razón de ser
en este mundo, si tenemos los medios productivos para crear e innovar, es para
hacer el bien y si ambos lideres son incapaces de apreciar lo bueno de cada invención,
de cada visión empresarial y de cada trabajo individual, están perdidos en sus
propias imperfecciones.
Caso
contrario vemos como hay lideres intelectuales como Jim O’Neill, quien con su
equipo de trabajo han sido capaces de utilizar su energía productiva, desarrollaron
los bloques de crecimiento económico, conocidos como los BRIC, compuesto por Brasil,
Rusia, India y China, países que han sido llamados a impulsar la economía
global. Que diferencia hacen las mentes positivas
que están enfocadas en la productividad y creatividad para erigir nuevas
fuentes evolutivas en beneficio de la humanidad y del bienestar económico de
sus pobladores, extendiendo la economía de libre mercado para sostener las democracias.
Debemos
de inmovilizar el continuo choque entre los políticos con los empresarios y con
la institucionalidad democrática que solo generan incertidumbre entre los
salvadoreños. Busquemos entendimientos y
soluciones entre estos sectores, exijamos a que dejen por fuera los intereses
particulares de cada uno, rebusquemos impulsos y atrevimientos para sacar
adelante nuestra economía y nuestra democracia.
Pensando como una nación renovada, recapacitando como cambiar la táctica
productiva para alcanzar nuestra prosperidad económica, tomando ventaja de los
BRIC, quienes serán los motores económicos del Siglo XXI, pero no, estamos como
Chuchos y Gatos.
Nos
encontramos sin debatir los problemas que mas afectan la tranquilidad del
salvadoreño: La inseguridad y la economía.
He aquí, donde debemos de poner nuestro mejor esfuerzo con responsabilidad
individual y trabajar duro para lograr la prosperidad nacional, debemos cambiar
la estrategia exportadora y aprovecharnos de la moneda fuerte con la que
contamos en los intercambios comerciales, debemos beneficiarnos del hecho que
tenemos la inflación mas baja de algunos países de Latinoamérica, estas
realidades económicas son nuestra mejor carta de presentación como nación que
nos permite conectarnos con la economía mundial.
Podemos
lograr el cambio de táctica, hacia la libertad económica e individual, siempre
y cuando dejemos las trincheras de los intereses grupales permanentes del poder. Si vamos a remplazar, dejemos aun lado la desconfianza
y la animalada y pongámonos a trabajar duro para decir con orgullo: Soy Salvadoreño.
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